viernes, 2 de diciembre de 2016

En el cuarto de los recuerdos

Mientras hacia una limpieza a conciencia (como suele decir mamá) dentro de nuestras curiosidades me encontré con algunas cositas dentro de un cuarto que me trajeron muchos recuerdos, es que acá entre nos ¿Quien no tiene en casa un espacio exclusivo donde vas poniendo cosas viejitas, que ya no vas a utilizar o simple y sencillamente las pones ahí con etiqueta de "para revisar con mas calma después"? ¿Quien no tiene algo asi en casa? (Considero que la gran mayoria, no quiero sentirme como la especie rara aqui).

Primeramente me tope con esto. 




Dare una pista para que puedan adivinar, hace algunos años venia en las sabritas, ya saben los famosos premios que uno obtinen por ser fiel consumidor. ¿Adivinaron?

Probablemente si o tal vez no, los que si lo hicieron sera porque somos del mismo club, (aqui es donde los codeo y guiño el ojo) ya tenemos algunos añitos caminando en este mundo eh, y lo digo de manera amable, haber utilizado la palabra viejos o viejitos sonaria muy fuerte y noo... ta'mos jovene pue'.

Eso que se ve es un billete de $20 sii, un billete de $20 nuevecito y de paquete aun en su envoltorio. ¿Recuerdan esos ayeres en las que sabritas regalaba dinero? Pues bien, por unica vez en lo que va de mi vida mi fidelidad fue premiada aquel dia. Ahora viene a mi memoria aquella ocasión en donde las sabritas traían un cupon, si mal no recuerdo tenias que elegir raspar alguna casilla, estas mostraban flechas, las cuales te iban indicando que casilla raspar y asi sucesivamente hasta averiguar si la que habias elegido al inicio podia, siguiendo las flechas concluir anotando gol (algo asi era, tipo laberinto) ¿El premio?... ¡un auto!. Como fiel consumidora de estos productos tuve muchas oportunidades, pero hubo una ocasion en la que estuve bastante cerca, tan cerca que de la emoción si creí habia ganado ¡un auto!. Estabamos a punto de llamar, reunidos cerca del telefono ya saben para reclamar el premio, yo con la emocion, pensando; por fin mi gusto por las sabritas cosechaba frutos, iba a regalar ¡un auto! a la familia. Cuando alguien, no se quien, mira el cupon y dice; "pero esta mal". Y si... al final hubo una flecha ingrata por ahi y pues no mas no. Lo unico que he ganado en estas cosas ha sido eso y como ya ven aun se conserva en su envoltorio.

Otras de las cositas encontradas dentro de nuestras curiosidades han sido esto;




La primera vez que tuvimos la oportunidad de ir a un viaje, cuando ya ibamos de salida del primer hotel en el que nos habiamos hospedado, mientras acomodabamos las maletas, el mayor de mis hermanos entro al baño, un minuto despues salio con los jabones chiquitos en la mano (venus rosa 😄😄) los metio a la maleta, mientras el menor de mis hermanos y yo lo seguiamos con la mirada, el volteo y dijo; me los llevo.

Desde entonces las veces que hemos estado en algun hotel, siempre antes de irnos vamos al baño y nos llevamos los jabones, el shampoo o lo que sea que este ahi. (¿Podria verse como un robo?)




Todos hacemos eso ¿no? Y si no, pues deberian. Hubo una vez donde sacrificamos uno de esos jabones y shampoo porque en el lugar donde nos hospedamos no habia nada.

Y hablando de hoteles tengo una duda. En los hoteles solemos encontrar instrucciones, directorios, algun menu, o tarjetas de las personas que hacen la limpieza, pero en alguna ocasion dentro del primer cajon de un pequeño buro vimos una biblia. ¿Por que habia una biblia? Ignoro la razon. El mayor de mis hermanos decia; "¿no sera que aqui espantan?"

Me paso algo curioso una vez, en un hotel, pero sera en otra ocasion, porque eso... es otra historia.


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